viernes, 19 de febrero de 2010

la matematica


Es evidente que los niños consideran como dos campos distintos e inconexos: las matemáticas escolares, entendidas de forma científica, y las matemáticas de la vida cotidiana.
Algunos contenidos matemáticos son reconocidos fácilmente aplicados a la práctica, mientras que otros se prestan menos al reconocimiento o toma de conciencia.
La motivación es mayor si le encuentran funcionalidad a los contenidos matemáticos en su contexto inmediato. Por lo tanto, sería recomendable crear en los niños la necesidad de acudir a la matemática para encontrar solución a los problemas cotidianos.
Sería necesario replantear la secuenciación de los contenidos matemáticos en función de la realidad y características contextuales. Evitando la parcelación en cuanto a su tratamiento y apostando por su encadenamiento significativo (es decir, unos contenidos lleven a otros, se parta de lo asimilado por los niños antes de comenzar a trabajar un nuevo aspecto matemático,...).


Todas estas ideas van a repercutir en la práctica educativa.